Mudarse a una nueva ciudad conlleva una larga lista de tareas pendientes. Además de inscribir a los niños en la escuela y encontrar la tienda de comestibles más cercana, también deberá encontrar un nuevo dentista.
Elegir el mejor dentista para usted y su familia es importante, pero no tiene por qué ser un calvario. Cambiar de dentista puede ser rápido y fácil cuando se sabe qué esperar y cómo hacerlo.
Crear una lista corta de candidatos
La Sociedad de Salud Dental es un excelente lugar para comenzar a buscar un nuevo dentista. El botón de concertar una cita genera una lista de profesionales cualificados en un área específica. Sólo tienes que rellenar el formulario y responder a algunas preguntas.
Los compañeros de trabajo y los nuevos vecinos también pueden ser un buen recurso para obtener recomendaciones sobre todo tipo de cosas en una nueva ciudad, incluidos los dentistas. Esas recomendaciones deben ir seguidas de un poco de investigación en línea. Muchos dentistas tendrán reseñas en línea, lo que ayudará a identificar un dentista para usted. (Solo tenga en cuenta que una o dos críticas negativas no son necesariamente algo malo: no todos los dentistas son adecuados para todos los pacientes. Pero un patrón de malas críticas podría significar algo).
Muchos consultorios dentales también están activos en las redes sociales; consultar Facebook o Instagram puede dar una idea de la personalidad del dentista y el ambiente de la oficina.
Otra posible fuente de recomendación es el dentista anterior del paciente. Esto puede no ser cierto para una reubicación al otro lado del país, pero podría ser útil para un paciente que se muda a solo unas pocas ciudades de distancia. Es posible que conozca a alguien de la comunidad dental con quien asistió a la escuela de odontología o a conferencias dentales que comparta su filosofía y estilo.
¿Cuáles son tus imprescindibles?
Al igual que cualquier otra opción, la mayoría de los pacientes tienen una lista de verificación de las cosas que les gustaría tener en un nuevo dentista. Una ubicación y un horario convenientes suelen ser los primeros de la lista. También hay especialidades a tener en cuenta.
Decidir con anticipación si un dentista general o familiar es el mejor ayuda a acotar la búsqueda. O tal vez a los niños pequeños de la familia les iría mejor con un dentista pediátrico. Y si un niño tiene necesidades especiales, por ejemplo, uno que está en el espectro del autismo, es particularmente importante encontrar a alguien con las habilidades necesarias para que el niño se sienta cómodo.
Las necesidades dentales especiales pueden dictar a qué dentista o dentistas consultar. Alguien con problemas de encías puede beneficiarse de alguien con experiencia en raspado y alisado radicular, que son tratamientos comunes para la enfermedad periodontal. Si un paciente acude al dentista para recibir servicios cosméticos, puede ser importante que encuentre a alguien que le ofrezca los productos a los que está acostumbrado. Por ejemplo, un usuario de Invisalign querrá encontrar a alguien que esté certificado para ofrecer el producto, especialmente si está en medio del tratamiento. Y si regularmente se someten a algo como blanqueamiento dental con láser, es posible que solo esté disponible en algunas de las prácticas dentales locales. Esto puede acortar la lista de posibles dentistas para el paciente.
Decidir cómo pagar la atención médica
Un dentista nuevo en una ciudad nueva puede terminar costando más, o menos, de lo que un paciente está acostumbrado a pagar. Es importante averiguar qué dentistas y qué servicios están cubiertos por su programa de seguro dental, si es que tienen uno.
Para los pacientes sin seguro que puedan tener inquietudes sobre el costo, recomendamos discutir el tema con los consultorios dentales antes de tomar la decisión de a quién ver. Pregunte por los precios y las opciones de pago. Muchos consultorios trabajarán con los pacientes ofreciéndoles planes de pago o aceptando métodos de pago como CareCredit.
Ser nuevo en la ciudad también puede ser una ventaja. Pregunte acerca de ofertas especiales y descuentos para nuevos pacientes.
Es hora de transferir sus registros
Una vez que un paciente se decide por un nuevo dentista, es hora de transferir su historia clínica y registros dentales. Esta información es esencial para mostrar problemas anteriores, procedimientos y trabajos dentales con todo detalle. El historial dental de un paciente es muy importante para ayudar al nuevo dentista a comprender los problemas específicos de su nuevo paciente y planificar la atención futura.
La mayoría de las clínicas dentales utilizan ahora archivos digitales, lo que facilita la transferencia de datos de un dentista a otro. Aun así, el proceso puede llevar un tiempo, por lo que es inteligente comenzar tan pronto como se elija un nuevo dentista.
A menudo, todo lo que se necesita es una llamada telefónica al dentista anterior. Por lo general, requerirán un formulario de autorización firmado, ya que los registros dentales, al igual que los registros médicos, son privados. Esto reconoce que el paciente ha solicitado la transacción.
En algunos casos, el nuevo dentista puede hacer que los nuevos pacientes completen un formulario de solicitud formal antes de que se comuniquen con el dentista anterior. Lo mejor es hablar con ambos consultorios dentales para averiguar exactamente qué se necesita para la transferencia. Los consultorios dentales tratan con nuevos pacientes todo el tiempo y es probable que tengan un procedimiento que permita una transición sin problemas. En el improbable caso de que uno de los dentistas no coopere, el paciente debe ponerse en contacto con su sociedad dental profesional local o estatal.
Qué esperar en su primera visita
Una vez que los expedientes de un paciente estén en manos de su nuevo dentista, estará listo para reanudar su atención dental de rutina. Por supuesto, no es necesario esperar estos registros si hay una emergencia dental. Un dentista puede ver a un nuevo paciente inmediatamente si es necesario.
En la primera visita con un nuevo dentista, se les pedirá a los pacientes que completen formularios con información personal y detalles del seguro. El examen inicial puede ser más largo que un chequeo normal, ya que es la primera oportunidad del dentista para observar los dientes del paciente. El dentista también querrá tomar radiografías a menos que la historia clínica del paciente incluya radiografías recientes. Las radiografías se recomiendan todos los años, por lo que cualquier cosa más antigua se consideraría obsoleta. Hay varios tipos diferentes de radiografías con diferentes propósitos. Para un chequeo inicial, lo más probable es que el paciente reciba radiografías de ala de mordida, que son una buena y completa visión de todos los dientes.
Al hacer la primera cita, es perfectamente aceptable preguntar sobre el costo y cuánto tiempo durará la visita. Algunos consultorios pueden incluso poner a disposición sus formularios de admisión en línea para que los pacientes puedan completarlos en casa antes de venir al consultorio.
Con un poco de planificación, mudarse a una nueva ciudad no tiene por qué significar interrumpir su cuidado dental de rutina. Siempre y cuando sepas qué esperar, cambiar de dentista no tiene por qué ser difícil.